La leyenda del tenis australiano, Margaret Court, es una conocida homofóbica que lleva ya un lustro haciendo campaña en contra del matrimonio igualitario, aunque era hace poco más de 3 meses cuando desataba realmente la polémica ante su boicot a la aerolínea Qantas, porque apoyan el matrimonio igualitario, y unas abominables declaraciones en las que declara que el mundo del tenis «está lleno de lesbianas», afirmando además que los niños transexuales son fruto de Hitler y el comunismo. Gestos homofóbicos que han tenido como consecuencia que la hayan expulsado de su club de tenis, en Perth.
En su escalada de declaraciones homofóbicas, Court llega a afirmar que la homosexualidad es una impía «codicia por la carne», que las tendencias de las personas homosexuales, bisexuales y transexuales en los jóvenes eran «cosa del diablo», y que las antiguas estrellas del tenis lesbianas han «convertido» en homosexuales a las nuevas jugadoras. Si la campaña contra el matrimonio igualitario se recrudece pocos días antes de que se inciara la consulta por correo y un sacerdote llega a afirmar que habría que «disparar a los homosexuales», en su desaforada campaña personal contra el matrimonio igualitario, Court llega a afirmar que si gana el SÍ, la Navidad, la Semana Sanata y el Día de la Madre serían cancelados.
Pero finalmente ha sido el Cottesloe Tennis Club de Perth, del que Court era vicepatrona durante muchos años, donde han impuesto el castigo más contundente a sus homofóbicas declaraciones. En la votación para su reelección com ovicepatrona, ha perdido por un voto «políticamente motivado», según interpreta la propia Court, quien describe el hecho de haber sido expulsada del club como algo «triste», alegando que «no tienes la libertad de expresión hoy en día para defenderte a ti misma (…). Es un día triste para nuestra nación cuando se trata de eso».
«Si tienes una opinión que es muy polarizadora, cuando estás tan firmemente a favor o en contra de algo, entonces vas a tener un impacto en cómo eres percibido por la comunidad», declara Michael Roberts, presidente ejecutivo del club, quien considera que la homofobia de la tenista ha jugado un papel muy importante en el resultado de la votación. El presidente del club, Ian Hutton, ha querido aclarar que no sólo los puntos de vista de la tenista sobre el matrimonio igualitario han contribuido a ese resultado, sino también su ausencia en multitud de eventos organizados por el club.
Fuente: UniversoGay.com
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